jueves, 26 de febrero de 2009

EL DON DE LA IGNORANCIA

RECUERDO aquel paseo
solitario
en que sólo el silencio
era lo que alcanzaba
a oír entre las hojas,
y podía sentirme
como un árbol,
sentirme como un pájaro.
Y recuerdo también
un único paseo
acompañado,
hace ya mucho tiempo.
No puedo recordar
quién pisaba las hojas
a mi lado.

José CORREDOR MATHEOS

No hay comentarios:

Publicar un comentario