miércoles, 12 de septiembre de 2012

MORTAL Y ROSA


Khoa LE

CALAMBUR

La axila vegetal, la piel de leche,
espumosa y floral, desnuda y sola,
niegas tu cuerpo al mar, ola tras ola,
y, lo entregas al sol; que le aproveche.

La pupila de Dios, dulce y piadosa,
dora esta hora de otoño larga y cálida,
y bajo su mirada tu piel pálida
pasa de rosa blanca a rosa rosa.

Me siento dios por un instante; os veo
a él, a ti, al mar, la luz, la tarde.
Todo lo que contemplo vibra y arde,
y mi deseo se cumple en mi deseo:
dore mi sol así las olas y la
espuma que en tu cuerpo canta, canta
-más por tus senos que por tu garganta-
do re mi sol la si la sol la si la.

Ángel GONZÁlEZ

miércoles, 25 de julio de 2012

FUMANDO ESPERO


Fumar es un placer
genial, sensual.
Fumando espero
al hombre a quien yo quiero,
tras los cristales
de alegres ventanales.
Mientras fumo,
mi vida no consumo
porque flotando el humo
me suelo adormecer...
Tendida en la chaisse longue
soñar y amar...
Ver a mi amante
solícito y galante,
sentir sus labios
besar con besos sabios,
y el devaneo
sentir con más deseos
cuando sus ojos veo,
sedientos de pasión.
Por eso estando mi bien
es mi fumar un edén.

Dame el humo de tu boca.
Anda, que así me vuelvo loca.
Corre que quiero enloquecer
de placer,
sintiendo ese calor
del humo embriagador
que acaba por prender
la llama ardiente del amor.

Mi egipcio es especial,
qué olor, señor.
Tras la batalla
en que el amor estalla,
un cigarrillo
es siempre un descansillo
y aunque parece
que el cuerpo languidece,
tras el cigarro crece
su fuerza, su vigor.
La hora de inquietud
con él, no es cruel,
sus espirales son sueños celestiales,
y forman nubes
que así a la gloria suben
y envuelta en ella,
su chispa es una estrella
que luce, clara y bella
con rápido fulgor.
Por eso estando mi bien
es mi fumar un edén.

¿Carlos Gardel?

jueves, 5 de julio de 2012

LA MUERTE DE UN POEMA QUE VUELA

Nos ocupamos del mar

y tenemos dividida la tarea.

Ella cuida de las olas

yo vigilo la marea.

Es cansado,

por eso, al llegar la noche,

ella descansa a mi lado,

mis ojos en su costado.

También cuidamos la tierra

y también con el trabajo dividido.

Yo troncos, frutos y flores,

ella riega lo escondido.

Es cansado,

por eso, al llegar la noche,

ella descansa a mi lado.

Mis manos en su costado.

Todas las cosas tratamos

cada uno, según es nuestro talante.

Yo lo que tiene importancia,

ella todo lo importante.

Es cansado,

por eso, al llegar la noche,

ella descansa a mi lado

y mi voz en su costado.

Javier Krahe

jueves, 21 de junio de 2012

TERRA NOSTRA


Arkiniano

Tiempo de PAN Y CIRCO

Al villano se la dan
la cebolla con el pan.

Para que el tosco villano,
cuando quiera alborear,
salga con su par de bueyes 5
y su arado (¡otro que tal!)
le dan pan, le dan cebolla,
y vino también le dan.
Ya camina, ya se acerca,
ya llega, ya empieza a arar.

Anónimo castellano

viernes, 25 de mayo de 2012

LA ALEGRE PRIMAVERA


FEDOSOV

Sad is my soul even to death

Tristis est anima mea usque ad mortem ;

sustinete hic, et vigilate mecum :

nunc videbitis turbam, quæ circumdabit me.

Vos fugam capietis, et ego vadam immolari pro vobis.

Ecce appropinquat hora, et Filius hominis

tradetur in manus peccatorum.

sábado, 28 de abril de 2012

BORGES DUERME EN GINEBRA

LA LENTITUD DE LOS BUEYES

1. Nuestra quietud es dulce y azul y torturada en esta hora...

Nuestra quietud es dulce y azul y torturada en esta hora.

Todo es tan lento como el pasar de un buey sobre la nieve. Todo tan blando
como las bayas rojas del acebo.

Nuestro abandono es grande como la existencia, profundo como el sabor
de las frutas machacadas. Nuestro abandono no termina con el cansancio.

No es un error la lentitud, ni habitan nuestra alma las oquedades del conocimiento.

En algún zarzal lejano anida un pájaro de aceite que nace con el día. Siento su sed
granate algunas veces. Su abandono es tan dulce como el nuestro.

Su lentitud no está desposeída de costumbre.



* * * * *


3. Nada trasciende la densa mansedumbre de esta tarde...

Nada trasciende la densa mansedumbre de esta tarde.

Todo está en calma delante de mis ojos: las cigüeñas varadas
sobre el silencio, y los frutales florecidos más allá del tendido del ferrocarril.

En odres muy antiguos, tan antiguos que ni siquiera el dolor
puede alcanzarles, está guardado el tiempo. Y su costumbre deja posos
más ácidos y azules que el olvido.

Como hierba crecida entre ruinas, la soledad es su único alimento y,
sin embargo, su sustancia es tan dulce como nata crecida.

Abstenéos, no obstante, de ponerle interrogantes amarillas
o de buscar dioses de trapo allí donde existen solamente aguas absurdas.

De todos es sabido que el tiempo no posee otra grandeza
que su propia mansedumbre.



* * * * *


7. Hay racimos de soledad en tus manos...

Hay racimos de soledad en tus manos, desposesiones más antiguas
que la sangre.

Huyen los años de tus ojos como bandadas de cometas por las plazas maduras.
(Sólo quedan los bueyes rumiando su tristeza.)

Has conocido, entre gavillas de silencio, el sabor amarillo de mis pasos,
el humo indescifrable de las brasas sin tiempo.

Nunca mi lejanía se amasó con barro, pero puse en tu boca las yemas más
quemadas y los besos más lentos. Nunca mi lejanía se espesó hasta tu cuerpo.

Como una fuente vieja, azul desde su olvido, arrinconaste el miedo
en arcas inviolables.

Ni siquiera el dolor estalla entre tus labios. Ni siquiera la antigua,
la salada tristeza de mis besos.



* * * * *



11. Si te pusiera copos de tierra sobre la boca...

Si te pusiera copos de tierra sobre la boca, sabrías la acidez que me posee.

Si apoyase mis preguntas en tus hombros, te desmoronarías como una
estatua de sal.

(¿O acaso puede alguien soportar el equilibrio de los árboles más altos?)

Pero no quiero condenarte a ser cuenco de nieve o roca muda.

Advierto en tus andenes una espera infinita y tus silencios me son agrios
como bruma.

Los mercaderes montan sus puestos de mentiras y perfumes a tu paso.
Tus recuerdos esperan, apostados como perros, el momento en que se incendie
la nostalgia.

Reconozco que mis preguntas aumentarían tu indefensión.



* * * * *



13. Yo no recuerdo sino el sabor de la duda...

Yo no recuerdo sino el sabor de la duda como un alud de fresas
sobre las blandas escamas de mi boca.

He olvidado el lugar donde las nieves más azules consiguen resistirse
a su abandono.

He olvidado ya hace tiempo la dócil lentitud de los molinos.

Mucho antes de la hora de los vagabundos, y a través de arboledas heladas,
caminé largamente hacia la mansedumbre. Busqué los prados donde pastan
los bueyes más antiguos.

Rocas más amarillas que el silencio puse sobre mi incertidumbre.
Rocas más dilatadas que algodón.

Y no quedó otra cosa que la duda fluyendo dulcemente, como nata derretida.

Yo no sé si, después de la muerte, alguien vendrá a dormirme con leyendas
aprendidas en lugares lejanos.

Yo no sé si el aguacero de la nada apagará los hornos de la mendicidad.

Pero es seguro que palabras absolutas, más absolutas que vasijas de aceite
derramadas, me estarán esperando al otro lado del olvido.

Y entre esas voces acuñadas sobre moldes de arcilla y certidumbre,
mi voz sonará extraña como tomillo arraigado en las cuestas del amor.

Mi voz será como un paréntesis de duda.

Julio LLAMAZARES

jueves, 5 de abril de 2012

FIELDS OF GOLD (versión mía)

Me recordarás cuando el viento del oeste acaricie
los campos de cebada;
le contarás al sol, en su celoso cielo,
que caminábamos entre campos de oro.

Abrazó a su amado para contemplarlo un instante
entre los campos de cebada
y cayó entre sus brazos con el pelo suelto
como un campo de oro.

Te quedarás conmigo, serás mi amante
entre campos de cebada,
y podrás contarle al sol, celoso en su cielo,
de cuando caminábamos
entre campos de oro.

STING (Gordon SUMNER)

Nunca hago promesas a la ligera
porque tuve que romper algunas,
pero juro por los días que me quedan
que caminaremos entre campos de oro.

Muchos años han pasado desde aquellos días de verano
entre los campos de cebada:
Mira a los niños corriendo mientras cae la tarde
entre los campos de oro.

miércoles, 4 de abril de 2012

KIM KARDASHIAN

FIELDS OF GOLD (DORADOS CAMPOS), o cómo se destroza un poema al traducirlo mal

RECORDARÁS CUANDO EL VIENTO DEL OESTE SOPLE
SOBRE LOS CAMPOS DE CEBADA
OLVIDARÁS EL SOL EN SU CELOSO CIELO
MIENTRAS CAMINAMOS EN CAMPOS DE ORO

ASÍ QUE ELLA TOMÓ A SU AMOR
PARA MIRARLO UN MOMENTO
SOBRE LOS CAMPOS DE CEBADA
EN SUS BRAZOS CAYÓ CON SU PELO SUELTO
ENTRE LOS CAMPOS DE ORO

¿TE QUEDARÁS CONMIGO
ENTRE LOS CAMPOS DE CEBADA?
OLVIDAREMOS EL SOL EN SU CELOSO CIELO
MIENTRAS CAMINAMOS EN CAMPOS DE ORO

MIRA EL VIENTO MOVERSE COMO UN ENAMORADO
SOBRE LOS CAMPOS DE CEBADA
SIENTE SU CUERPO ELEVARSE CUANDO BESAS SU BOCA
ENTRE LOS CAMPOS DE ORO
NUNCA HAGO PROMESAS A LA LIGERA
Y HAY ALGUNAS QUE HE ROTO
PERO JURO POR LOS DÍAS QUE ME QUEDAN
QUE CAMINAREMOS EN CAMPOS DE ORO
CAMINAREMOS EN CAMPOS DE ORO

MUCHOS DÍAS HAN PASADO DESDE ESOS DÍAS DE VERANO
ENTRE LOS CAMPOS DE CEBADA
VEO A LOS NIÑOS CORRER MIENTAS EL SOL SE VA
ENTRE LOS CAMPOS DE ORO
ME RECORDARÁS CUANDO EL VIENTO DEL OESTE SOPLE
SOBRE LOS CAMPOS DE CEBADA
PUEDES NOTAR AL SOL EN EL CIELO CELOSO
CUANDO CAMINAMOS POR LOS CAMPOS DE ORO
CUANDO CAMINAMOS POR LOS CAMPOS DE ORO
CUANDO CAMINAMOS POR LOS CAMPOS DE ORO



Te acordaras de mi cuando los vientos del oeste se muevan
sobre los campos de barley
te olvidaras del sol en su cielo azul
como caminando en campos de oro
entonces ella tomo su amor
por un poquito tiempo
sobre los campos de barley
en tus brazos ella cayo como su cabello cae
atraves de los campos de barley
te quedaras conmigo y sera mi amor
atraves de los campos de barley
olvidaremos el sol en su cielo azul
como nos acostabamos en los campos de oro
ves el viento del oeste moverse como el amor
sobre los campos de barley
siente como su cuerpo se levanta cuando besas su boca
atraves de los campos de oro
nunca hice promesas a la ligera
y si han estado las e kebrado
pero yo juro en dias ser correcto
caminando en los ampos de oro
csminsndo en los campos de oro
algunos años han pasado desde esos dias de verano
atraves de los campos de barley
ves los niños correr como el sol cae
atraves de los campos de oro
te acordaras de mi cuando el viento del oeste mueva
sobre los campos de barley
olvidaras el sol en su cielo azul
cuando caminamos en los campos de barley
cuando caminamos en los campos de barley
cuando caminamos en los campos de barley.

Me recordarás cuando el viento oeste pase
sobre los campos de cebada.
Olvidarás el sol en su celoso cielo
cuando andemos en los campos de oro.

Así ella llevó a su amor
a mirar un rato
los campos de cebada.
En sus brazos cayó cuando soltó su pelo
Entre los campos de oro.

¿Te quedarás conmigo? ¿Serás mi amor
entre los campos de cebada?
Olvidaremos el sol en su celoso cielo
acostados en los campos de oro.

Mira el viento oeste pasar como un amante
sobre los campos de cebada.
Siente subir su cuerpo cuando le besas la boca
entre los campos de oro.
Nunca hago promesas a la ligera
y hay algunas que he roto
pero te juro que en los días que quedan
caminaremos en los campos de oro
caminaremos en los campos de oro.

Han pasado mucho años desde aquellos días del verano
entre los campos de cebada
Mira correr los niños cuando baja el sol
entre los campos de oro.
Me recordarás cuando el viento oeste pase
sobre los campos de cebada
se lo puedes decir al sol en su celoso cielo
cuando anduvimos en los campos de oro
cuando anduvimos en los campos de oro
cuando anduvimos en los campos de oro


Sting (Gordon Matthew Thomas SUMNER)

martes, 3 de abril de 2012

MORENA AUTODEFINIDA

POEMA XIX

Niña morena y ágil, el sol que hace las frutas,
el que cuaja los trigos, el que tuerce las algas,
hizo tu cuerpo alegre, tus luminosos ojos
y tu boca que tiene la sonrisa del agua.

Un sol negro y ansioso se te arrolla en las hebras
de la negra melena, cuando estiras los brazos.
Tú juegas con el sol como con un estero
y él te deja en los ojos dos oscuros remansos.

Niña morena y ágil, nada hacia ti me acerca.
Todo de ti me aleja, como del mediodía.
Eres la delirante juventud de la abeja,
la embriaguez de la ola, la fuerza de la espiga.

Mi corazón sombrío te busca, sin embargo,
y amo tu cuerpo alegre, tu voz suelta y delgada.
Mariposa morena dulce y definitiva
como el trigal y el sol, la amapola y el agua.

Pablo NERUDA

LA RUBIA, LE HORLÀ

LA RUBIA

Enamorarse de la rubia hasta los huesos.
perder el sueño, la camilla
el poco criterio, la cabeza.
Ir con la rubia, tras la rubia,
por la rubia, como el Dante
al mismisimo ombligo del infierno.

Hay mujeres mas bellas,
pero la rubia es la rubia,
como el semen, el helado de crema,
el impermeable amarillo de Dick Tracy.

La rubia es una pesadilla que se vive despierto
La rubia es un enigma al final del hastío y de la fiesta.
Y hay que amarla así,
rubia traicionera, amante del amigo,
escapada de un filme del deseo.

Inútil convencerla, desteñirla,
implorarle piedad para este corazón.

Antes de ella, sereno,
imposible evitar los conflictos nocturnos
con sus ojos de barco, su boca negadora,
su pelo de cerveza,sus otras obviedades,
su increible figura de sirena terrestre
maldecida en silencio por las viejas.

Enamorarse de la rubia hasta los huesos
antes de que la edad, la tumba,
o la comodidad del hogar
nos arruine la fiesta.

¿Anónimo?

domingo, 25 de marzo de 2012

GEOGRAFÍA

Respuesta de Don Tomás de Iriarte a una dama que le preguntó qué era lo mejor que hallaba en su cuerpo

Con licencia, señora, de ese pelo
que en rubias ondas llega a la cintura,
y de esos ojos cuya travesura
ardor infunde al pecho más de hielo;

con licencia del talle, que es modelo
propuesto por Cupido a la hermosura,
y de esa grata voz cuya dulzura
de un alma enamorada es el consuelo,

juro que nada en tu persona he visto
como el culo que tienes, soberano,
grande, redondo, grueso, limpio, listo;

culo fresco, suavísimo, lozano;
culo, en fin, que nació, ¡fuego de Cristo!,
para el mismo Pontífice romano.

Tomás de IRIARTE

PASCUAL DUARTE

(La poesía nos libera del caos)

Vivimos enteramente en el pasado,

nutridos de pensamientos muertos,

de credos muertos, de ciencias muertas.

Es el pasado, no el futuro lo que nos devora.

El futuro siempre ha pertenecido

y seguirá perteneciendo al poeta.


Henry MILLER

domingo, 18 de marzo de 2012

TE QUIERO O NO

NO te quiero sino porque te quiero
y de quererte a no quererte llego
y de esperarte cuando no te espero
pasa mi corazón del frío al fuego.

Te quiero sólo porque a ti te quiero,
te odio sin fin, y odiándote te ruego,
y la medida de mi amor viajero
es no verte y amarte como un ciego.

Tal vez consumirá la luz de enero,
su rayo cruel, mi corazón entero,
robándome la llave del sosiego.

En esta historia sólo yo me muero
y moriré de amor porque te quiero,
porque te quiero, amor, a sangre y fuego.

Pablo NERUDA

LA MUJER ARAÑA


Olaf MARTENS

AL VOLVER

Aquí nació mi vida a la esperanza
y aquí esperé también que moriría;
ahora que vuelvo aquí, parecería
que el tiempo me persigue y no me alcanza.

Detiene otoño el paso a la mudanza
que en la luz, en el aire se extasía;
los árboles son llamas, su alegría
enciende ya mi bienaventuranza.

Todo pasó. Todo quedó lo mismo:
como si en este otoño floreciera,
ardiendo en el fulgor de su espejismo,

última para mí, la primavera;
abismo del no ser al ser abismo,
la eternidad del tiempo prisionera.

José BERGAMÍN

domingo, 4 de marzo de 2012

MANCHESTER ACCENT


Rob HEFFERAN

AUTOESCRITURA

Poema 4

Este es el único poema
que soy capaz de leer.
Y sólo yo
puedo escribirlo.
Otra gente parece creer
que el pasado puede guiarles.
Mi propia música
no está solamente desnuda.
Está abierta de piernas.
Es como una mujer.
Y como una mujer
tiene que ser orgullosa.
Yo no me maté
cuando las cosas me fueron mal.
No me dediqué
ni a las drogas ni a la enseñanza.
Intenté dormir,
pero cuando vi que no podía dormir
aprendí a escribir,
aprendí a escribir
cosas que pudieran ser leídas
en noches como ésta
por gente como yo.


Leonard COHEN, La energía de los esclavos

Artemisa / Diana






Era un murmullo el bosque, era la brisa
leve caricia en vuelo que no acaba;
eran besos las flechas en la aljaba
suspendida del hombro de Artemisa.

Virginal cazadora que improvisa
senderos, sobrepuja cada traba,
se cierra al hombre a pasador y aldaba,
y donde nadie ha caminado, pisa.

Quien desnuda la vio, sufrió la suerte
del ciervo, el oso, el jabalí: La muerte
al impacto de su arma arrojadiza.

Quien amarla intentó, logró el rechazo.
Ésta no era la diosa del abrazo,
sino del pulso que se independiza.

Francisco ÁLVAREZ HIDALGO
Los Angeles, 24 de noviembre de 2007.

lunes, 20 de febrero de 2012

Teresa Castanedo: "Todo me aparta de ti. Todo, menos yo"

SEMÁFORO

Esa chica que espera ahí enfrente
en el semáforo
¿quién será?, ¿a dónde irá?,
¿de dónde vendrá,
con el bolso en bandolera?
Lleva un abrigo azul...

Guardará en ese bolso revuelto
pañuelos de papel,
su carnet de identidad
y el número de un anuncio
anotado en su agenda.
Parece frágil, cordial,
pero no sé nada de ella.

Pasa un furgón de policía,
suena una sirena de ambulancia.

Pudo ser la mujer de mi vida
si un día la hubiera
conocido en una fiesta,
en cierta ocasión...
Pero no sé nada de ella.
Hay un rumor de motores...

El semáforo en rojo y la chica
también me mira
¿Qué estará imaginando?
¿Qué pensará de mí,
con aire ausente? Tal vez
falte un amor en su vida.

Pasa un furgón de policía
suena una sirena de ambulancia.

Ya se ha puesto el semáforo verde,
la chica avanza
hacia mí, yo hacia ella:
los dos al cruzar
sonreímos un instante...
Y no la sé retener.

Al llegar cada cual a su acera
ya para siempre
nos habremos olvidado.
Breve ilusión
en la noche que se enciende.
Llevaba un abrigo azul...
Nunca más volveré a verla.

Pasa un furgón de policía,
suena una sirena de ambulancia.

Llevaba un vestido azul.


Manuel VICENT

domingo, 12 de febrero de 2012

HISPALIA, ISBALIA, ISBILIA, SEVILLA


Ángela LERGO

AUTOBIOGRAFÍA ESCRITA EN BERLÍN ORIENTAL EL 11.9.1961

Nací en 1902.

Jamás he vuelto a mi ciudad natal.

No me gusta volver atrás.

A los tres años, en Halep, ejercité la profesión de nieto de pachá,

a los diecinueve la de estudiante en la universidad de Moscú,

a los cuarenta y nueve otra vez en Moscú:

y desde los catorce años escribo poesías.

Hay hombres que conocen mil variedades de hierbas, otros

conocen variedades de peces,

yo, de separaciones.

Hay hombres que saben de memoria el nombre de cada estrella,

yo, el de las nostalgias.

He dormido en las cárceles y en los grandes hoteles.

He pasado hambre. Casi no existe plato que no haya probado

incluido el de la huelga de hambre.

A los treinta años han querido ahorcarme,

a los cuarenta y ocho quisieron concederme la medalla de la Paz

y me la concedieron.

A los treinta y seis, necesité seis meses para recorrer

cuatro metros cuadrados de sombrío hormigón.

A los cincuenta y nueve, en dieciocho horas, volé

desde Praga a La Habana.

En 1951, en un mar, en compañía de un amigo,

anduve sobre la muerte.

En 1952, con un corazón cascado, tendido sobre la espalda,

esperé la muerte más de cuatro meses.

Fui locamente celoso de las mujeres a las que amé.

No le tuve ninguna envidia a nadie, ni siquiera a Charlot.

Engañé a mis mujeres.

Nunca hablé mal detrás de mis amigos.

He bebido, sin llegar nunca a borrachín.

Siempre con el sudor de mi frente

gané mi dinero. ¡Qué suerte para mí!

Sentí vergüenza ajena. Mentí.

Mentí por piedad.

Pero nunca dije mentiras porque sí.

He montado en tren, en avión, en coche.

La mayoría no lo consigue.

He ido a la ópera.

La mayoría no consigue ir

a la mezquita, la iglesia, el templo, la sinagoga, los hechiceros;

ni siquiera ha oído hablar de la ópera.

Sin embrago, desde los veintiún años no voy

a muchos sitios adonde va la mayoría,

pero suelo hacerme leer el porvenir

en los posos del café.

Mis escritos están impresos en cuarenta idiomas

y prohibidos en mi Turquía, en mi propia lengua.

No tengo aún el cáncer,

tampoco es obligación padecerlo.

Nunca seré primer ministro ni cosa parecida,

tampoco me gustaría serlo.

No fui a la guerra

Pero tampoco bajé a los refugios en medio de la noche.

No me arrastré en las carreteras

huyendo de los aviones que vuelan a ras de tierra.

Cerca de los sesenta me enamoré locamente.

En pocas palabras, amigos míos

Aunque esté hoy en Berlín muriendo de nostalgia,

puedo afirmar

que he vivido como un hombre.

En el tiempo que me queda por vivir

¿qué podrá ocurrirme aún?

Chi lo sá?

Nazim HIKMET

viernes, 10 de febrero de 2012

SOY DOS


Martin STRANKA

Tudo me interessa e nada me prende. Atendo a tudo sonhando sempre; fixo os mínimos
gestos faciais de com quem falo, recolho as entoações milimétricas dos seus dizeres expressos; mas ao ouvi-lo, não o escuto, estou pensando noutra coisa, e o que menos colhi da conversa foi a noção do que nela se disse, da minha parte ou da parte de com quem falei. Assim, muitas vezes, repito a alguém o que já lhe repeti, pergunto-lhe de novo aquilo a que ele já me respondeu; mas posso descrever, em quatro palavras fotográficas, o semblante muscular com que ele disse o que me não lembra, ou a inclinação de ouvir com os olhos com que recebeu a narrativa que me não recordava ter-lhe feito. Sou dois, e ambos têm a distância - irmãos siameses que não estão pegados.

Fernando PESSOA

LO INEFABLE




Amor es lo esencial...

Amor es lo esencial.
Sexo, mero accidente.
Puede ser igual
O diferente.
El hombre no es un animal:
Es carne inteligente,
Aunque algunas veces enferma.

(5.4.35)
Versión de Rafael Díaz Borbón


Autopsicografía

El poeta es un fingidor.
Finge tan completamente
Que hasta finge que es dolor
El dolor que de veras siente.

Y quienes leen lo que escribe,
Sienten, en el dolor leído,
No los dos que el poeta vive
Sino aquél que no han tenido.

Y así va por su camino,
Distrayendo a la razón,
Ese tren sin real destino
Que se llama corazón.

Versión de Santiago Kovadloff

Fernando PESSOA

domingo, 15 de enero de 2012

VARÓN CELTIBÉRICO

EL SNOB

Se compra un diccionario de Español-lnglés
se deja la barbita y la melena.
Se aprende las palabras very nice y yes
y empieza firmemente su carrera.

Coloca algunos posters en su habitación
y aprende a comportarse en sus maneras.
Se da una vueltecita por Televisión
y luego salga el sol por donde quiera.

Cuánto ganaría esta canción
si en vez de sí, dijera no.
Cuánto ganaría el pobre autor
si fuera inglés, y no español.

A veces es objeto de una invitación
a las presentaciones extranjeras.
Colgado al hombro lleva su magnetofón
y exige una butaca delantera.

Se toma medio whisky de barril, y tal
y mira con marcada indiferencia
las cosas que comentan a su alrededor
y busca un entendido en la materia.

Cuánto ganaría esta canción
si en vez de sí, dijera no.
Cuánto ganaría el pobre autor
si fuera inglés, y no español.

Los viajes son frecuentes a París, London
buscando la noticia callejera
y luego nos comenta que en el Albert Hall
charló con casi todas las estrellas.

Nos cuenta que pasó por una gran boutique
que trajo camisetas y vaqueros.
Nos dice que la música española está
subiendo poco a poco algún entero.

Cuánto ganaría esta canción
si en vez de sí, dijera no.
Cuánto ganaría el pobre autor
si fuera inglés, y no español.

Se viste como Adán para escuchar a Paul
y enciende la cerilla en la moqueta.
Apaga los plafones de la Siting room
y guarda su reloj en la chaqueta.

Le aburren los flirteos con las sexi girls
es algo que ya tiene superado.
Su mundo esta encerrado en una discoteque
en un vaso de whisky y un cigarro.

Cuánto ganaría esta canción
si en vez de sí, dijera no.
Cuánto ganaría el pobre autor
si fuera inglés, y no español.

José Luis PERALES

viernes, 13 de enero de 2012

SEMINARIO EDAD DE ORO

Romance con estribillo sobre un tema de PJP

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

bien se ve allá la vida
la que se fue y y no vuelve
la que nunca lo pensamos
y se nos fue para siempre
como quedan las estrellas
cuando por la noche encienden
la luz que no se distingue
pero que siempre aparece

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

la fatiga del vacío
quién sabrá de dónde viene
esta vaga sensación
de que todo va a perderse
o de que ya nada queda
nada vale nada duele
y nada llena el vacío
y da igual lo que sucede

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

tiembla el árbol pasa el viento
llega el día anochece
se abre la calle con voces
con luces ruidos y gentes
hay algo que nadie sabe
y sin embargo sucede
allá donde van los ojos
y la mirada se pierde

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

la chinita mis amores
mis amores los de siempre
los de siempre los que son
los que son los que suceden
suceden que cada día
cada día pasa y vuelve
todo lo que llega pasa
todo lo que fue se pierde
bien que lo dicen romances
bien que lo dice la fuente
la vida corre y el agua
nada su curso detiene
adónde se va no sabe
tampoco de dónde viene
un día llegó en sus ojos
lo que se ama lo que duele
dejó de ser lo que está
cuando ya dentro se siente

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

ahí los ojos rasgados
ahí lo que permanece
como el aire que respiro
lo que siempre siempre siempre
ahí va quedando y posa
ojos sangre pecho frente
trenzados en la canción
se canta lo que se pierde

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

cantar es decir su nombre
el nombre que labios mueve
recita en el corazón
luego la piel estremece
atraviesa los silencios
y todo mi ser enciende
con solo rozar recuerdos
lejanos oscuros leves
melodía interminable
que suena porque te quiere

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

cierra los ojos y pasa
nadie sabrá detenerte
cierro los ojos y escribo
el gesto de poseerte
este gesto tan extraño
el gesto de no tenerte
el de los ojos cerrados
el mismo con que se muere

a tu paso pasa todo
en tus ojos todo prende

Pablo JAURALDE POU

LA MIRONA


Manuel REBOLLO

miércoles, 11 de enero de 2012

GOODNIGHT, IRENE

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams

Sometimes I live in the country
Sometimes I live in town
Sometimes I have a great notion
To jump into the river and drown

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams

Quit ramblin' and quit gamblin'
Quit stayin' out late at night
Stay home with your wife and family
Sit down by the fireside bright

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams

I asked your mother for you
She told me you was too young
I wished to God I'd never seen your face
I's sorry you ever was born

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams

I love Irene, God knows I do
I'll love her till the seas run dry
And if Irene turns her back on me
I'd take morphine and die

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams

You cause me to weep, you cause me to mourn
You cause me to leave my home
But the very last words I heard her say
Was 'Please sing me one more song'

Irene goodnight, Irene goodnight
Goodnight Irene, goodnight Irene
I'll see you in my dreams


Huddie Ledbetter / John Lomax (1950)

ARNAVAT O EL LADO OSCURO

LITTLE BOXES

Little boxes on the hillside,
Little boxes made of ticky tacky,
Little boxes on the hillside,
Little boxes all the same.
There's a green one and a pink one
And a blue one and a yellow one,
And they're all made out of ticky tacky
And they all look just the same.

And the people in the houses
All went to the university,
Where they were put in boxes
And they came out all the same,
And there's doctors and lawyers,
And business executives,
And they're all made out of ticky tacky
And they all look just the same.

And they all play on the golf course
And drink their martinis dry,
And they all have pretty children
And the children go to school,
And the children go to summer camp
And then to the university,
Where they are put in boxes
And they come out all the same.

And the boys go into business
And marry and raise a family
In boxes made of ticky tacky
And they all look just the same.
There's a green one and a pink one
And a blue one and a yellow one,
And they're all made out of ticky tacky
And they all look just the same.


Malvina REYNOLDS

lunes, 9 de enero de 2012

METAPOESÍA

EL TRAVIESO

Siempre hay que recordarle al poema
que tiene que ayudarnos a escribirlo.
Su carácter ausente casi nunca
colabora con la necesidad
de decir que tenemos.
Él tiene la manía incorregible
de no expresar lo que pensamos,
de proponernos otras cosas
e incluso, con frecuencia, de callarse.

Por esto, debemos obligarlo
a escuchar cada palabra que decimos
—si es posible en voz alta—
hasta que consigamos que se siente
en la arena remota de algún folio
y con sus dedos de aire vaya haciendo
el dibujo preciso de la voz.

El poema no aguanta aquí sentado
y a los pocos renglones ya desobedece,
trazando con los pies
los garabatos que le van saliendo
a la vez que se acerca hasta la orilla
del folio y allí naufraga,
como un niño advertido del peligro
que implica no hacer caso a quien lo cuida.

Maneras de vivir, 1997.

Francisco José CRUZ

martes, 3 de enero de 2012